Mara en cuanto la vio se le disparó la imaginación: podía ser un cohete, o un coche, o un vehículo descapotable... Se fueron añadiendo ideas de l@s demás compañer@s: una casita, una cuna, un refugio...
Había que pasar a la acción. Si se le iba a dar vida a la caja, había que organizar el trabajo.
Borja y Vayron preferían jugar con ella tal como estaba, pero las chicas querían transformarla. Así que les propuse a ellas hacer el diseño en un papel, y una previsión de materiales para convertirlo en lo que finalmente habían decidido: un coche. Votaron el color del mismo y qué usarían para las ruedas. Mara, que va para ingeniera, llevaba la voz cantante y enseguida empezó a organizar el "cotarro".
Pensaron que querían un coche rojo, con cuatro ruedas. Había que plasmarlo en un papel, pero antes había que repartir el trabajo. Mara hizo la silueta del coche y además escribió el texto, junto con Martina, quien además repasó las letras con rotulador y coloreó parte del dibujo; Julia y Noa participaron dando color al coche.
Ojo a este grupo de pekeingenieras, que en breve montan una pequeña o mediana empresa en nuestras instalaciones. Al tiempo. Y por lo legal, sin dispositivos que contaminen como los de la Volswagen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario