NUESTRO RINCÓN PARA COMPARTIR
Hace unos días vino a visitarnos la Maga Luna. Fue una suerte, ella normalmente anda muy ocupada; siempre está viajando y conociendo nuevos mundos.
Vive en una isla (Ínsula Fabulae) con forma de delfín, en medio del océano (traía un mapa muy chulo, para que nos hiciéramos una idea...) Está habitada por personajes de cuentos; pero no cuentos normales, no. Son cuentos al revés. En ellos no está Caperucita, sino el Lobito Caperucito, por ejemplo. Y no está Cenicienta sino el príncipe Ceniciento. Y la selva está custodiada por una mujer (Tarzana), no por un hombre.
Nos contó un cuento llamado "Blancanieves y los siete alienígenas". Es la historia de una niña que quiere ser cantante. Ella pensaba que bastaba con cantar y hacerse famosa, así que buscó trabajo como cantante. Pero... resulta que no: que se necesita saber solfeo, baile, música, saber de notas musicales y pentagramas, tocar algún instrumento... Es decir, necesitaba formarse. Afortunadamente, aprendió la lección: todas las personas deben luchar y esforzarse por alcanzar sus metas, con el objetivo de ser personas independientes y felices. Se puso manos a la obra, a estudiar y formarse, hasta que consiguió su sueño.
Gran lección.
¿...Que cómo conseguimos que viniera a nuestra clase esta Maga tan especial..? Sospecho que es amiga de Puerto, la persona que trabaja en la Oficina de Igualdad de la Mancomunidad. Porque fue hablar con ella y a los pocos días apareció por aquí.
Lo mejor es que volverá más adelante para contarnos otro cuento. Es tan sabia y podemos aprender tanto con ella...
¡Gracias, Maga Luna, te esperamos más adelante!
Estos pekesdebarrado tienen visión empresarial.
Han traído de casa frutas y frutos típicos de otoño, y enseguida han montado el chiringuito. Su idea inicial era vender y comprar, pero... probaron los higos, pelaron alguna castaña, rompieron alguna nuez... empezaron a comerla... Y el comer y el rascar, todo es empezar, ya sabéis...
Así que dijo Rubén que lo mejor era hacer un restaurante. Lo ha diseñado para mañana, y nos ha anunciado que será de cinco estrellas. Nos ha mandado barrer para que el suelo estuviera limpio, pues según él en un restaurante de 5 estrellas el suelo está impecable; y ha aconsejado a sus compañer@s que mañana vengan muy guap@s, ya que los camareros de los restuaurantes de cinco estrellas van muy elegantes.
Estad atentos, que este Rubén monta un negocio en un periquete. Dentro de unos años, lo veremos en algún negocio importante, ya veréis. Al tiempo. Ingenio e ideas no le faltan.
La semana pasada nuestra Martina favorita hizo cuatro añazos. ¡Casi ná..! Y pensar que el curso pasado era la más pequeña del cole...
Ahora es toda una señorita, podéis verla aquí:
De paso queremos agradecer a las familias (niños/as, papás, mamás...) que pintaron la pared del cole en septiembre. Quedó REQUETEBONITA.
¡GRACIAS!
Estuvimos revisando para qué servía cada contenedor, y como coincidía que esa mañana nuestra papelera de plásticos estaba ya llena, hicimos una "excursión a los contenedores". Se fueron turnando la bolsa desde el aula hasta el punto limpio, todos querían llevarla. Este día aún los más pequeños estaban en el período de adaptación; eran las nueve y media, aún no había llegado su hora de entrada al cole. Con ellos haremos la actividad más adelante.
Ayer en nuestra asamblea matutina Erick dijo que estaba triste, que tenía un problema. Y es que, nos comunicó, no sabe si quiere más a Natalia o a Mara.
Os pongo al corriente de la situación: hasta ayer, Erick y Mara eran novios. Pero en el camino de Erick ha aparecido Natalia, y ahora está hecho un lío...
Rubén le propone que tenga dos novias. Una, dentro de la clase, y otra fuera (Natalia ya está en 1º de Primaria; o sea, en otro aula). Es más: le dice que "una verdadera" y otra "de repuesto". Le pregunto si a él le gustaría ser "de repuesto", pues sospecho que eso no nos gusta a nadie...
Él reconoce que sí, que es verdad, pero que la de "repuesto" es igual de importante que la otra (vamos, que lo arregló en un periquete).
A todas éstas, Mara empieza a llorar. Todos la consolamos y le decimos que hay otros chicos estupendos en el cole, pero ella dice que sólo quiere a Erick (vaya rompecorazones está hecho este chico...) Y que además quiere tener novio, y si él no la quiere, no lo tendrá. Le explicamos que no pasa nada por no tener novio, que ya lo tendrá cuando sea mayor (¡por Dios, que los dos tienen cuatro años..!) Pero ella sigue llorando. Dice "es que si no tengo novio no puedo tener hijos, y yo quiero tenerlos..." Su amiga Martina, que es un sol, la abraza para que no esté triste.
Esto fue a primera hora de la mañana, y a la hora del recreo ya subía Erick de la mano de Natalia. Parece ser que la tristeza por la indecisión no le ha durado mucho. O eso, o es que ya tenía tomada la decisión y en vez de hablar con Mara a solas, dio una "rueda de prensa" en la asamblea para informarnos a todos a la vez: a la susodicha afectada, a los amigos del novio, y a los allegados a la novia.
Y Mara en el recreo estuvo jugando y riéndose, así que parece ser que la sangre no llegó al río. Por cierto, hace unos días Mara propuso a Erick casarse, pero él decía que mejor esperar a ser mayores (no se le veía con muchas prisas por formalizar la relación, no; no sabemos si ya tenía en mente a Natalia o es que sencillamente es un espíritu libre).
En fin Mara, eso es que te espera otra personita estupenda por ahí, no te preocupes. Cada cosa a su tiempo.
Lástima que ya se haya terminado el festival de cine de San Sebastián, si no algún guionista seguro que se hubiera interesado por la historia para hacer una peli (por ejemplo, "amoríos y desamoríos a los 4 años de edad")
Fin del pekedrama (al menos de momento...)
El benjamín del cole cumplió ayer tres añazos. ¡Otra categoría!
Muchas felicidades para él, y para su familia.
¿Quién dijo que sólo las mujeres podían hacer dos cosas a la vez? Mirad a nuestro Vayron, a la vez que come está ayudando a su amigo Borja a barrer. Cómo se nota que está a puntito de cumplir ya los tres años.
Y es que después de la merienda, hay que limpiar el mantelito y la mesa, barrer si vemos que han caído restos de comida al suelo, y luego ir al baño y lavarse manos y boca. Así estaremos listos para bajar al arenero. "¡Casi ná!"
